Hoy 30 de julio, Día internacional contra la Trata de Personas, la Asamblea de Ezker Anitza-IU Donostia recuerda que hace casi un año el Ayuntamiento se adhirió a la Red de Municipios Libres de tráfico de mujeres, niñas y niños destinados a la prostitución y a luchar contra la explotación sexual y, sin embargo, la trata de personas sigue siendo un problema en la ciudad.
Desde la formación de izquierdas afirman que la trata y el proxenetismo es un problema enraizado también en nuestra sociedad; de hecho, hace pocas semanas ha sido desmantelada una red dedicada a la explotación sexual de personas asentada en Donostia, de forma que se hace palpable que hay que tomar medidas urgentes para acabar con esta lacra, comenzando, por ejemplo, por visibilizar que la trata y el ejercicio forzado de la prostitución es un problema también presente en Donostia, tal como se señaló en la declaración aprobada en septiembre del año pasado en el Ayuntamiento.
La trata de personas y la explotación sexual, que es la forma de esclavitud moderna por excelencia, constituye, tal como se reconoce en la misma declaración, ”un negocio para organizaciones delictivas que obtienen importantes beneficios y están implantadas en Gipuzkoa”. Pero además, “bajo el paraguas de la difusa regulación en este tema, proliferan los “hostales” o “clubs”, obvios centros de trata de mujeres y menores, amparados por una normativa laxa e insuficiente para controlar lo acontecido en los mismos.”
Desde Ezker Anitza-IU Donostia quieren recordar que la responsabilidad hacia la erradicación de esta esclavitud recae en el trabajo de distintas instituciones; es necesario que desde éstas se impulsen acciones judiciales contra los explotadores sexuales, incrementar la colaboración con los cuerpos de seguridad, desarrollar una labor de sensibilización social -en especial a los hombres, que son los usuarios mayoritarios de esta esclavitud-, y proteger y apoyar en todo momento a las víctimas.
Por este motivo, desde la asamblea piden a las instituciones, y en concreto al Ayuntamiento de Donostia, que se redoblen los esfuerzos para detectar este tipo de delitos; tal como se recoge en la declaración que se realizó en septiembre del 2020. Asimismo, solicitan aumentar los recursos económicos y humanos destinados al desmantelamiento de las redes de trata y explotación sexual de personas, con especial foco en la que sufren mujeres y niñas, y que se establezcan medidas y ayudas concretas para la integración e inserción laboral de las víctimas de trata, tráfico y prostitución. Ante la trata y la explotación sexual, hoy y todos los días del año, tolerancia cero.
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