Desde el comienzo de la actual situación de excepcionalidad provocada por el coronavirus, el grupo municipal Elkarrekin Donostia ha trasladado al Alcalde la necesidad de valorar de forma urgente las necesidades de la población donostiarra más vulnerable, contactando con todas las personas mayores de 65 años y aquellas que tengan algún tipo de dependencia o discapacidad reconocida de tal manera que se pueda valorar cualquier necesidad de ayuda o apoyo ante esta circunstancia excepcional. Una vez conocida la situación entre los colectivos más vulnerables, desde la coalición de izquierdas plantean, en caso necesario, reforzar el servicio de ayuda a domicilio.
Las concejalas de Elkarrekin consideran que con la actual situación de cierre de los centros educativos y los centros de día para personas mayores, junto a la especial vulnerabilidad de las personas mayores, es necesario poner en marcha un plan público de cuidados para atender a toda la ciudadanía donostiarra que lo necesite.
Para ello es imprescindible reforzar las herramientas existentes, como es el caso del servicio de ayuda a domicilio, además de poner en marcha aquellas nuevas que se consideren necesarias pueda cubrir todas las necesidades que se han disparado con la actual situación de excepcionalidad, coordinando dentro del plan a las redes comunitarias o voluntarias que puedan existir, garantizando los protocolos y la seguridad de trabajadores y voluntariado de ser necesario.
“Se debe en primer lugar reforzar y dimensionar los Servicios municipales de Ayuda a Domicilio para cubrir el aumento de las necesidades, incluyendo en el mismo a todas las personas mayores y /o con situaciones de movilidad reducida o discapacidades reconocidas que lo soliciten” aseguran desde Elkarrekin. En este sentido, han recordado que ya desde hace dos semanas vienen insistiendo al gobierno municipal sobre la necesidad de asegurar los equipos de protección individualizados para sus trabajadoras, como garantía para evitar posibles contagios ya que los usuarios y usuarias del servicio, principalmente, personas mayores, son los de mayor riesgo.
Desde Elkarrekin recuerdan que las trabajadoras del servicio han denunciado la falta de equipos de protección y ante esta situación han trasladado al gobierno municipal la necesidad de supervisar de forma directa el servicio al objeto de asegurar que se cumplan estrictamente las medidas de seguridad.
Sin embargo, la empresa adjudicataria del servicio ha asegurado que hasta el momento los protocolos actuales establecen que “el uso de mascarillas sólo son necesarias cuando la trabajadora tenga problemas respiratorios agudos o la persona usuaria que atienda los tenga, en ningún otro caso”. Por este motivo, desde la coalición plantean la necesidad de modificar los protocolos establecidos por Osakidetza al objeto de incrementar las medidas de seguridad y reducir las posibilidades de contagio.
Desde Elkarrekin Donostia insisten en que, “con el objetivo de buscar soluciones entre todos y todas para salir de esta situación lo antes posible” es preciso aumentar las medidas de seguridad y ampliar en caso necesario el actual servicio para garantizar que toda la población donostiarra tenga sus necesidades básicas cubiertas.
